No hay caso recordar
tanto,
sin embargo,
voy sintiendo que se escarcha
sin embargo,
voy sintiendo que se escarcha
una sanguijuela en mi cerebro,
ese ímpetu de correr tormentos
con astucia,
ese atávico resquemor de la desdicha,
si fuera un verdor dulce
que vaticina la ida al sur
con los sueños
con los sueños
y augurios
de que la vida volaba hacia
de que la vida volaba hacia
el paraíso,
antes de interrumpirla
antes de interrumpirla
en mi adolescencia
con los gritos fuera
con los gritos fuera
de mi casa,
gritos de mujer,
de brazos maniatados,
impetuosos rompiendo hacia los patios
ensangrentando su ira candorosa.
Yo recuerdo el abismante ideal hacia
los futuros verdaderos de la verdad cierta
y pura
de ser humano digno.
de ser humano digno.
Todo se quedó en las vísceras, todo
lo absorbió el intestino,
todo se evacuó
para florecer,
dormido
para florecer,
dormido
en la tierra
largos años,
y ahora,
todo
me sorprende,
como un fantasma,
errante
y desorientado.
y desorientado.